domingo, 16 de noviembre de 2008

Piedras y gemas

Malaquita

Es una de las gemas más antiguas que se conoce. Existe, prácticamente, desde que nació el mundo. Así como el Lapislázuli, también la malaquita fue piedra predilecta de reyes y faraones. Símbolo de cambio y creatividad. Su densidad no transparente absorbe fácilmente la energía y éste es el secreto de su poder y eficacia en las experiencias de meditación para facilitar la concentración. Puente de equilibrio entre los chakras, sirve por igual a todas las partes del cuerpo, resulta beneficiosa si se la usa conjuntamente con azurita o crisocolla. Por su facilidad de absorción magnética, la malaquita debe ser cuidadosamente limpiada después de su uso para que mantenga su capacidad vibratoria benéfica. El agua y el sol son insustituibles en este proceso. Su vibración equilibrante restaura el sistema nervioso y armoniza los problemas de índole emocional. Es también espejo síquico que absorbe energías negativas, por lo tanto se debe limpiar diariamente. Calma los dolores físicos, especialmente en los que afectan el bazo y el páncreas.

Es magnífica para concentrarse y meditar, llevando al individuo a estados de gran belleza interna. Aleja las influencias síquicas negativas, calma y relaja los procesos mentales, estimula el nervio óptico y mejora la visión.



Piedras y gemas

Magnetita

Piedra imantada de gran valor para quien la use, personal o para otras personas, ya sea en el aspecto de alejar negatividades como en casos de curación. Da energía, tres veces más que otras piedras, si especialmente se la trabaja con las fuerzas de la pirámide. Las personas o sanadores que la tengan para curación, pueden llevarla intuitivamente a todos los chakras. Es una piedra que detiene mucha afecciones, disipándolas. Ha sido muy útil en manifestaciones cancerosas. Se aviene muy bien con otras piedras para trabajar o llevarla encima, pero no es conveniente juntarla con el granate o el rubí. (Su poder es muy superior al mineral óxido de hierro, mena de hierro). Dos variedades, el rojo y el gris oscuro.



Piedras y gemas

Lapizlázuli


Es conocida también como la piedra de Isis, en Egipto. La piedra de los antiguos alquimistas. La piedra de Venus, la diosa del amor.

Los hindúes aseguran que ayuda a quemar el Karma o el fruto de acciones negativas del ser humano. Tradicionalmente se le ha considerado un símbolo del poder y la realeza, desde la época de los egipcios, que lo han utilizado en abundancia, ya que se pensaba que era la gema de los dioses.

Lo empleaban en polvo, para neutralizar el efecto de venenos y curar algunas enfermedades. En meditación se usa colocándola sobre el tercer ojo para desbloquear el funcionamiento de la mente y liberar las fuerzas intuitivas. Marca el camino de la iluminación, dando claridad mental y capacidad síquica. Es la «cúralo todo». Aumenta el poder espiritual del individuo, hace el cuerpo más sensitivo y eleva la tasa vibratoria a altos niveles. Provee vitalidad. Desbloquea los chakras. Símbolo de poder interno y externo. Con la amatista, cuarzo verde y cuarzo rosado se logra un camino al conocimiento y paliar profundamente los estados de temor, incertidumbre, opresión, amargura y depresión. Es LUZ absoluta y se ha escrito que es la intercomunicación con otros planetas, además de haber sido fundamental para la existencia de la Atlántida. Muy servicial para quienes la buscan y la aman. La persona que use lapislázuli debe estar conectada armoniosamente con la pirita. Ayuda en la tiroides, pulmones y

bazo. Chakras:(bazo) cardiaca y plexo solar.

Piedras y gemas

Labradorita


Regala amistad, amor y armonía, especialmente entre las parejas, manteniéndolas unidas. Promueve a entender la propia realidad entre las personas y es positiva para ejercicios en la apertura del Tercer Ojo. Es facilitadora a nivel físico de las intuiciones y la inspiración, por lo tanto quien la use, sentirá el venir de nuevas percepciones, especialmente para los que laboran en esas áreas. Equilibra el aura y es un escudo protector cuando se trabaja en tales dimensiones. Positiva en los chakras plexo solar y base, así como en la coronaria y Tercer Ojo.



Piedras y gemas

Jaspe

Piedra de valor y fortaleza de ánimo. Promueve la energía mental y espiritual. Ideal para iniciar nuevos proyectos. En sanación es muy buena para trastornos estomacales y afecciones hepáticas. Su polaridad es positiva-proyectiva. En los sanadores nivela el aura. Pese a tener varios colores, el más conocido es el rojo, familia del rubí. Es propiciador abierto para negocios y personas con deseos de triunfar. Actúa positivamente en los chakras plexo solar y base.